Capitán Calzoncillos: Su primer peliculón (David Soren, 2017) es un film muy infantil, un humor blanco que puede recordarnos fácilmente las historietas de Zipi y Zape o Mortadelo y Filemón.
Aunque la firme Dreamworks, no esperéis aquí guiños para adultos porque no los hay como en otras cintas. Esto no es Shrek ni Kung Fu Panda sino una historia plana aunque correcta y muy divertida para pasar un rato entretenido en familia.
Capitán Calzoncillos: la trama
Tiene como protagonistas a dos chavales de primaria, Jorge y Berto en la versión en español, que comparten la pasión de planear bromas y crear sus propios cómics de superhéroes.
Entre todas las historias que crean tienen un personaje predilecto: El Capitán Calzoncillos, un superhéroe con unos calzones superelásticos que tiene todas las habilidades y poderes necesarios para enfrentarse a los malos. Hasta aquí nada fuera de lo corriente ¿verdad?
¿Y si os digo que se el capitán pasa de ser un personaje de ficción a un personaje de carne y hueso? 😉
El señor Carrasquilla es el director del colegio donde estudian estos dos amigos que pasan mucho tiempo en su despacho debido a sus travesuras. Un día, por accidente, le hipnotizan y, desde entonces, cada vez que alguien chasquea los dedos, el señor Carrasquilla se convierte en el Capitán Calzoncillos.
Y cuando se le echa agua por encima, la situación se revierte y el director vuelve a su ser. Jorge y Berto tratarán de arreglar este estropicio antes de que alguien más se entere de lo que han hecho. Un lío ¿verdad? Pues esperad a conocer al malvado Cocoliso Cacapipi.
Sí, los chistes escatológicos siembran la película y harán que vuestros hijos se rían a carcajadas y no paren de repetir los días siguientes caca culo pedo pis. Por otra parte, nada que no hagan sin necesidad de ver esta peli.
Técnicas utilizadas
Para quienes, como yo, estéis interesados en aspectos técnicos de las pelis os contaré que, aunque la trama es simple, no lo es su ejecución. Utiliza técnicas de narrativa fragmentada, algo a lo que nos tienen más que acostumbradas las series.
Mezcla varias texturas: desde el 3D de la animación general pasa a ilustraciones cercanas al 2D y juega en ocasiones con marionetas de calcetín y la magia del stop-motion.
Además, David Soren rompe la cuarta pared, esa que separa al espectador de la historia. Los protagonistas se dirigen al público como si de un amigo más se tratara y, así, lo incluyen en la propia película. No es nuevo pero sí llama la atención en cine infantil.
Del papel a la pantalla
La película está basada en los libros infantiles del Captain Underpants, escritos por Dav Pilkey y editados por El barco de vapor. Si a los niños les gusta la peli, podéis aprovecharlos como lectura para el verano…
Aunque la recomendación es a partir de los 6 años, pueden verla niños más pequeños sin problema. De hecho, Jimena, que aún se pierde en otras películas para niños con tramas más complejas, se rió muchísimo y la entendió a la perfección.
Puede que el ritmo frenético y la lógica de niño pequeño en la presentación de las secuencias haya ayudado.
¿Qué me decís? ¿Tenéis ganas de verla? Si vais ya me contaréis qué os parece el primer peliculón de El Capitán Calzoncillos.
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