Hace unos días tuvimos en casa una cena sorpresa para los niños muy especial.
Fue durante las vacaciones de Navidad, teníamos cena familiar en casa de mis padres: 14 adultos y sólo 2 niños, los míos.
Como os podéis imaginar en este tipo de reuniones, tanto en casa como fuera, la probabilidad de aburrimiento máximo de los peques es más que elevada.
Si estamos en casa es fácil porque tienen un montón de juguetes y si estamos fuera normalmente llevo un arsenal preparado en el bolso: cosas para pintar, algún juguete pequeño y, el as de la manga por excelencia, el Ipad. Pero aun así la diversión no está siempre garantizada.
Personalmente no me gusta nada abusar de este tipo de dispositivos (televisión, ipad, móvil…) para entretener a los niños, no tanto porque vean una película infantil en un momento determinado, sino por el hecho de que se hagan «dependientes». Es decir «me aburro» = «veo la tele o cojo el Ipad».
Así que cuando nos planteamos como se iban a entretener ese día en nuestra reunión familiar decidimos sorprenderles con una cena diferente gracias a los platos sorpresa de Mamá me lo como todo. ¿Los conocéis?
Cena sorpresa con Mamá me lo como todo
Desde que os hablé por primera vez de este juguete tan especial el concepto no sólo ha mejorado muchísimo sino que creo que han conseguido una herramienta fantástica para de manera puntual ayudar a que los niños se lo coman todo y estén bien entretenidos durante un buen rato.
Así, no en vano, quedaron finalistas en el concurso anual de «Mejor Juguete del año 2016» organizado por la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ) ¡Y no me extraña nada! Ya veréis todo lo que llevan y que juguete tan completo…
A simple vista no os podéis imaginar todo lo que traen sus nuevos kits «vamos a poner la mesa».
Como veréis en las fotos hay dos modelos y los podéis adquirir en los siguientes enlaces Princesas y Caballeros. ¿El precio? Con todo lo que trae seguro que no os lo podéis creer.
¿Qué encontramos en el kit «Vamos a poner la mesa» de Mamá me lo como todo?
1.- Para poner la mesa.
Lo primero que nos encontramos es una caja preciosa donde, al abrirla nos encontramos todo lo necesario para que los peques monten su propia mesa: un plato sorpresa, un mantel puzzle, una botella, pajita y cubiertos de madera (cuchara, tenedor y cuchillo)
Sólo con este detalle os digo que la cena sorpresa ya fue un éxito ¡queda ideal encima de la mesa! Todo el mundo quedó prendado de la idea y los niños ni os cuento.
Mis hijos aquella noche, mientras los mayores preparábamos todo y nos tomábamos un aperitivo en el salón con los invitados, estuvieron un buen rato entretenidos montando su mantel. (Por favor no os perdáis la cara de concentración de J…)
El puzzle es de 24 piezas y está desarrollado de forma que sea lo más estable posible. Además está diseñado como tablero de juego de mesa con el que los peques podrán jugar una vez acaben de comer y con las piezas que encuentren en la caja… pero no nos adelantemos 😉
La botella, la pajita y los cubiertos vienen en una bolsa a parte así que podéis conservarla hasta que vayan a comer.
2.- El plato sorpresa.
Este es el principal reclamo de nuestra cena sorpresa. Un plato en el que poner la comida de los peques y que, cuando se lo coman todo, esconde en su interior un montón de actividades chulísimas para seguir con el juego.
La verdad es que ese día había de comer un pavo exquisito con puré de verduras que a los niños les encanta pero creo que en un momento puntual puede ser un gran aliado para introducir nuevos alimentos ¿no os parece?
Y cuando digo muchísimas actividades no me quedo corta porque dentro de los platos de Mamá me lo como todo encontraréis:
- Un mini libro con un comic, pasatiempos y dibujos para colorear.
- 3 rotuladores.
- Un kit DIY donde los peques podrán hacer sus propias tiaras o yelmos.
- Fichas, dados e instrucciones para jugar con el puzzle mantel.
- Cromos sorpresa.
¡Hay para todos los gustos! J estuvo un buen rato mirando el comic y jugando a los pasatiempos mientras que Jimena se entretuvo pegando las pegatinas en el mantel además de pintar el yelmo y la tiara.
El diseño de los kit DIY dependen del modelo de caja que elijáis. La cuestión es que los niños deberán diseñar sus propias tiaras y yelmos.
Pueden colorearlas, ponerles piedras preciosas adhesivas o las pegatinas y montarlas para ponérselas y seguir jugando.
El cartón es súper resistible y viene acompañado de dos elásticos especiales para que los niños luzcan sus creaciones sin hacerse daño. Y no os preocupéis por el tamaño porque seguro que podéis adaptarlo a vuestros peques.
¿Verdad que quedan bien? Pues no os podéis imaginar el rato que estuvieron entretenidos los niños mientras cenábamos.
Además el juego dio para mucho y los mayores acabamos coloreando con ellos y jugando al mantel puzzle e incluso alguno se quedó el resto de la noche con una de las tiaras de la caja de princesas 😉 ¡Fue muy divertido!
Así que sólo puedo recomendároslo encarecidamente. De hecho si en alguna ocasión tenéis niños invitados a casa quedarán más que encantados con el detalle y dará vía libre a la imaginación y al juego en grupo. ¡Incluso podéis regalarlo para un cumpleaños!
Pero aquí no acaba la cosa porque si entráis en la web de Mamá me lo como todo veréis toda la información para formar parte del «Club Mamámelocomotodo» donde a través de su aplicación móvil podréis conocer los restaurantes adheridos al club y que cuentan con los platos en sus menús infantiles, conseguir regalos sorpresa y descubrir viajes en familia.
¿Qué os parece? ¿Organizamos una cena sorpresa para los peques? ¡Nosotros repetimos seguro!
¡Que ideales! Tomo nota para la próxima reunión familiar.
Muchas gracias por el descubrimiento