He escrito cinco veces este post y no encuentro la mejor manera de expresar todo lo que os quiero transmitir con esta historia.

Podría empezar contándoos que conozco a los protagonistas desde mucho antes de que fueran una familia, que para mi son importantes porque nos une una persona muy especial para ambos, que son un ejemplo de entereza y lucha digno de admiración o que la vida en unos años, y por varias razones, les ha puesto muchas piedras en el camino… Pero todo esto se quedaría corto.

Sandra y Javi comenzaron hace casi un par de años una aventura con el pequeño de sus tres hijos, Gonzalo. Quienes le conocen bien dicen de él que es un niño alegre, cariñoso y que lo que más le gusta del mundo es estar con sus hermanos. Nada fuera de lo corriente ¿Verdad? Pero, además de todo eso Gonzalo es un campeón.

Parálisis cerebral infantil Asociación Campeones

Es difícil para mí intentar imaginar qué sintieron el día que les confirmaron que el pequeño tenía una afectación cerebral grave debida a una infección del citomegalovirus durante el embarazo de Sandra. Y menos cuando no hubo aparentemente ninguna complicación durante el embarazo ni en el parto.

Ese día empezaban una aventura llena de obstáculos y a contrarreloj para ayudar a su hijo con todos los medios que estuvieran en su mano. Rabia, incertidumbre, dolor…. ¡Eran tantas las dudas que le les planteaban!

Pero lo que no sabían entonces es que por el camino iban a encontrar también tantas cosas buenas que no sólo les ayudan a seguir adelante sino que les han dado fuerzas para ayudar a otros campeones.

Pero seguro que preferís ver el siguiente vídeo y que así os lo cuenten ellos mismos 😉

Así que la Asociación Campeones nace para ofrecer ayuda a familias que necesitan tratamientos para sus campeones y estoy segura de que no sólo lo conseguirán sino que dentro de muchos años sus tres hijos comprenderán la magnitud de su labor y estarán orgullosos de ellos, sobre todo Gonzalo.

Qué os parece ¿Les ayudamos a difundir su mensaje?