No me he vuelto loca. Sí, sé que estamos en junio. Pero, y tienes que reconocerlo, la foto de portada es una bonitez que me he encontrado buscando fotos para hablar de embalaje eco y que sé que vas a guardar con un pantallazo para estas navidades. De nada 😉

Andaba yo pensando en la cantidad de paquetes que mandamos y recibimos a lo largo del año. No hace falta que tengas un negocio on line -aunque si lo tienes, seguro que también te interesa- el aumento de las compras en plataformas digitales y la compraventa de cosas de segunda mano, por ejemplo, ha hecho que muchos hogares sean pequeños centros de distribución. ¡Desde luego en casa nos pasa!

De hecho, es por la compraventa de artículos de segunda mano, que me he puesto a buscar embalaje eco para hacer un poco de acopio. Pero ¿por qué interesarme por un embalaje sostenible?

¿Qué es el embalaje eco?

En esto de cuidar el planeta hay dos argumentos «negacionistas» que usan muchas personas y que me ponen nerviosa.

El primero es «eso es una moda»

Eco, sostenible, verde, natural, reciclable… ¿crees que son modas pasajeras? Te equivocas. Múltiples actores medioambientales y asociaciones sin ánimo de lucro trabajan cada cada día por dar visibilidad al enorme problema de los residuos.

De hecho, el plástico es actualmente una de las grandes amenazas del planeta ya que cada año hasta 12 millones de toneladas de plástico o micro plásticos acaban en nuestros océanos causando graves daños. Es esa la razón por la que cada vez cobra más importancia la utilización del llamado packaging ecológico.

Pero ¿qué es el packaging ecológico?

Muy sencillo: aquel que se diseña y fabrica teniendo en cuenta la sostenibilidad y el respeto medioambiental. Es decir, que se han tomado medidas en su fabricación tales como emplear materiales biodegradables o reciclables, reducir la huella de carbono o buscar el mínimo impacto en el proceso, como en el trasporte.

Y como en la foto no te olvides que también existen otros tipos de productos que se usan y busca sitios de confianza donde venden viruta de madera, por ejemplo, papel de burbuja ¡y muchas cosas más!

El segundo es: «yo no puedo hacer nada»

¡Pensamiento erróneo, de nuevo! De hecho te vuelvo a poner la foto cuqui para preguntarte ¿de verdad crees que no hay nada de tu mano?

Hoy en día este tipo de embalajes están al alcance de cualquiera. Además de un precio asequible este tipo de embalajes tienen alta durabilidad, son resistente, ligeras y se pueden reutilizar. ¿Merece entonces comprar embalaje eco? la respuesta está clara: ¡por supuesto!

Recuerda, el embalaje eco, mola.